Telecinco ha anunciado su nueva apuesta televisiva para esta temporada: Mudanza a Mordiscos, un reality show en el que parejas jóvenes, endeudadas y emocionalmente frágiles deberán hacer en 24 horas lo que ni Marie Kondo sobria se atrevería: empaquetar toda su vida, mudarse a un piso sin ventanas en Valdemoro, y decorarlo en directo, mientras contratan una hipoteca a 50 años con un tipo variable explicado por una señora disfrazada de calculadora.
El programa será presentado por Arturo Valles, el hombre que logró popularizar Master Mierda, el talent show de eliminación por opiniones impopulares, y que ahora se lanza al vacío hipotecario con una sonrisa y un flexo.
“Queremos mostrar la épica de la clase media en ruinas,” ha declarado Valles, mientras paseaba por un set decorado como una tienda de segunda mano después de una explosión. “Esto no es solo entretenimiento, es una vivencia traumática televisada. Es España.”
Hipoteca, drama y gotelé
El funcionamiento del programa es sencillo: seis parejas, seleccionadas por su inestabilidad emocional y su bajo perfil financiero, deben abandonar su antiguo piso, empaquetar todo sin ayuda profesional (solo con un rollo de cinta adhesiva y una suegra pasivo-agresiva), y mudarse a un piso idéntico a todos los pisos del extrarradio.
Una vez allí, tendrán que redecorarlo siguiendo retos semanales como “convierte tu baño en un spa usando solo materiales reciclados del contenedor amarillo” o “haz que tu cocina parezca funcional sin tener electrodomésticos”. Todo esto mientras firman una hipoteca en directo, asesorados por un “coach financiero” que en realidad es un camarero argentino con dos semanas de curso online.
El público votará no solo por el piso más bonito, sino por la pareja con mayor capacidad de autonegación. En caso de empate, el jurado —formado por una influencer, un notario retirado y el espíritu de Miguel Ángel Revilla— decidirá quién se queda con el premio final: una aspiradora sin bolsa y el aplazamiento del primer pago hipotecario por tres días.
Reality o distopía decorativa
“Mudanza a Mordiscos” no solo promete ser un éxito de audiencia, sino también un espejo de las miserias urbanas contemporáneas. Telecinco ha definido el formato como “entretenimiento emocionalmente irresponsable con toques de bricolaje”. La banda sonora corre a cargo de Rozalén, Vetusta Morla y un robot que llora.
“El programa refleja la nueva España: móvil, precaria, endeudada y obsesionada con el rincón del café”, afirma la directora de contenidos, Lucía Exposito, mientras en el fondo se escucha un grito de desesperación al montar una estantería sin instrucciones.
Las redes ya hierven. “Esto no es un reality, es un simulador de trauma inmobiliario”, tuiteó @hipotecado86. Mientras tanto, desde el Consejo General de Psicología advierten que “ver el programa podría provocar ansiedad secundaria, especialmente si estás esperando el visado del casero para colgar un cuadro”.
Spin-offs y merchandising emocional
Telecinco ya ha anunciado varios spin-offs en desarrollo: Mudanza Exprés VIP (con famosos de segunda categoría embutiéndose en lofts sin armarios), Decora o Paga (una versión extrema con penalizaciones económicas reales) y Mi Hipoteca, Tu Problema, donde se intercambian préstamos entre concursantes al azar.
También lanzarán una línea de productos licenciados, como papel de embalar con frases inspiradoras, velas aromáticas a olor de ansiedad financiera y cojines con forma de recibo bancario.
Así, Telecinco demuestra, una vez más, que no hay dolor humano que no pueda transformarse en espectáculo.
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